Detrás de cada sonrisa se esconde algo. En algunas situaciones la risa no representa humor o felicidad.
Alguna vez te has preguntado qué sentirías si cometieras un delito, por ejemplo un robo, una gran estafa o un asesinato y fueras atrapado por la policía? Imagina esa horrible situación, seguramente te morirías del miedo, los nervios te invadiera o la culpa no te dejara dormir.
Pero, ¿sentirías ganas de reirte? La mayoría sino es que todos, respondería que no. Sin embargo, existen casos en que eso sucede, reírse en el peor momento del mundo, al ser atrapado por la policía.

Los expertos identifican psicopatía, poder y narcisismo en el comportamiento de algunos criminales cuando son presentados en público tras ser capturados.
La psicóloga especialista en trastornos mentales, Feggy Ostrosky, señala de donde proviene esa caracteristica:
“El reaccionar así (sonriendo) es estar en el centro del foco de atención, lo cual es una enorme alabanza a su narcisismo”, dijo la autora del libro Mentes asesinas. “Eso es lo que están demostrando: ‘no importa, yo me burlo de ustedes’”.
“Los psicópatas son narcisistas, entonces son encantadores superficialmente; son manipuladores, no tienen sentimientos de culpa porque su cerebro está conectado diferente”.
“Es una sonrisa de soberbia”, “tienen mucho poder. El poder es algo fascinante para el ser humano, y qué más poder que sobre la vida y la muerte”.
“El hecho de que lo estén persiguiendo y que se sienta perseguido causa un agotamiento importante, por eso el momento en que los detienen puede ser precisamente una liberación”, indicó el investigador. “Es como decir ‘yo me libré, no terminé como alguno de los que yo mismo maté’”.